lunes, 7 de noviembre de 2022

20 de enero de 1810. Bautismo de Pedro José de la Luz Parra, hijo del Lic. Lorenzo Parra, en Querétaro. Los padrinos fueron el Lic. Vicente Lino Sotelo y María Felipa Torres.

20 de enero de 1810. Bautismo de Pedro José de la Luz Parra, hijo del licenciado Lorenzo José Parra y Terán (también Lorenzo de la Parra) y de doña María de la Luz Secundina Delgado y Cano, en Querétaro. Los padrinos fueron el licenciado Vicente Lino Sotelo y doña María Felipa de Torres. El acta, que se encuentra en la parroquia de Santiago, indica lo siguiente:

En la iglesia parroquial de Santiago, a veinte de enero de mil ochocientos die, yo el bachiller don Manuel Borja, con licencia del propio párroco de la Divina Pastora, bauticé solémnemente a Pedro José de la Luz, de tres días, hijo legítimo del licenciado don Lorenzo José Parra y Terán y de doña María de la Luz Secundina Delgado y Cano, ..., en la calle de la Cerbatana. Fueron padrinos el licenciado don Vicente Lino Sotelo y doña María Felipa de Torres, de la Plaza Mayor. Les dije su obligación y lo firmé. Firmas: Dr. José Rafael Gil de León y Br. Manuel Borja

Fuente: https://www.familysearch.org/ark:/61903/3:1:33S7-9PX3-XQZ?i=67 .


 Acta de bautismo de Pedro José de la Luz Parra, hijo del licenciado Lorenzo José Parra y Terán y de doña María de la Luz Secundina Delgado y Cano, en Querétaro., el 20 de enero de 1810


9 de abril de 1809. Matrimonio del Lic. Lorenzo Parra con María de la Luz Delgado y Cano, en la ciudad de México.

9 de abril de 1809. Matrimonio del licenciado Lorenzo José Parra y Terán (también Lorenzo de la Parra) con la señorita María de la Luz Delgado y Cano, en la ciudad de México. Se observa que el matrimonio fue por procurador, ya que el licenciado Parra se casó mediante un poder otorgado a don Juan Barrón. El acta de matrimonio, según los registros de la parroquia de San Miguel Arcangel de esa ciudad, indica lo siguiente:

En la Ciudad de México a nueve de abril del año del Señor de mil ochocientos nueve, habiéndose publicado, según disposición conciliar, el licenciado don Lorenzo Parra y Terán, español, soltero, natural de la ciudad de Querétaro, hijo legítimo de don Vicente Parra y de doña Petra Ignacia Terán, y de doña María de la Luz Delgado y cano, española, doncella, natural de la ciudad de Celaya, y vecina de esta, hija legítima de don Antonio Delgado Gorospe y de doña María de la Luz Cano y Tobar, y no habiéndoles resultado canónico impedimento alguno, yo, el bachiller don Francisco Morentín, teniente de cura de esta parroquia (venia parrochi) en la calle de Balvanera , casa número nueve, a las ocho menos cuarto de la noche, con arreglo al rito y orden de la Iglesia, y previa orden del señor provisor y vicario general de este arzobispado, cual se manifiesta en el despacho de veinte del próximo pasado marzo, habiendo comparecido don Juan Barrón, de esta vecindad, y haciendo presente el poder que otorgó en veintitrés de febrero del corriente año de mil ochocientos nueve, el expresado licenciado don Lorenzo Parra y Terán, vecino de la ciudad de Querétaro, ante el escribano real y público don Manuel Prieto, residente en la misma ciudad, en representación del otorgante contrajo verdadero y legítimo matrimonio con la referida María de la Luz Delgado y Cano, feligrés de esta parroquia, quien asímismo expresó su voluntad y consentimiento por palabras de presente, a la manera que lo hizo dicho apoderado, usando de la facultad que le es conferida. Fueron padrinos el licenciado don Benito José Guerra y su esposa doña Maríana Camila Ganancia, y se hallaron presentes como testigos don manuel Calderón, José Ignacio Cano Tobar y José Alvarado. Y para que en todo tiempo conste, lo firmé con el señor cura. Firmas: Dr. y Lic.   Juan José Güereña y Br. Francisco Morentín.          

Fuente: https://www.familysearch.org/ark:/61903/3:1:939D-8TFH-B?i=105&cc=1615259 .

 Acta del matrimonio del Lic. Lorenzo Parra con María de la Luz Delgado y Cano, en la ciudad de México, el 9 de abril de 1809.


24 de junio de 1830. Noticia biográfica del señor Domínguez en el Registro Oficial del Gobierno de los Estados-Unidos Mexicanos.

Jueves, 24 de junio de 1830. El peródico oficial, Registro Oficial del Gobierno de los Estados-Unidos Mexicanos publica una semblanza del licenciado Miguel Domínguez, quien falleció el 22de abril de ese año. No se menciona el autor de la semblanza por lo que tal vez pudiera atribuisele al editor del periódico.

NOTICIA BIOGRÁFICA DEL SEÑOR DOMÍNGUEZ. 

Nació el Sr. D. Miguel Domínguez en México el día 20 de enero de 1756, y dos meses después de su nacimiento se radicó su familia en la ciudad de Guanajuato, en la que recibió su primera educación, pasando a estudiar filosofía al colegio de S. Nicolás de Valladolid: después se trasladó al colegio de S. Ildefonso de esta ciudad a estudiar Jurisprudencia teórica, y la práctica en el estudio del célebre jurisconsulto D. Luis Galeano. El año 1786 se matriculó en el colegio de abogados, ejerciendo esta profesión con mucho concepto y aprecio público, desempeñando comisiones delicadas del gobierno y tribunales superiores hasta el año de 1790 en que sin solicitud ni pretensión alguna, fue llamado por el virrey conde de Revilla Gigedo para que sirviese de oficial mayor de gobierno y secretario de la junta superior llamada de real hacienda, cuyos empleos desempeñó en los gobiernos de los virreyes Revilla Gigedo, Branciforte, Azanza y Marquina, mereciendo de ellos y del público la más distinguida consideración. 

El año de 1801 con la mira de arreglar la provincia de Querétaro, sistemar su gobierno político y aquietar la exaltación de los ánimos, ocasionada por empeñosos litigios que tenía el ayuntamiento de aquella ciudad, se le nombró también sin pretenderlo, por D. Félix Berenguer de Marquina, corregidor letrado de ella y su jurisdicción, siendo este el único corregimiento de letras que existía en la llamada Nueva España, y el cual exigía para su aprobación, en la corte de Madrid, propuesta por el consejo y cámara de Indias, habiendo obtenido su nombramiento la aprobación real y orden expresa para que continuase en aquel corregimiento hasta que se le mejorase destino.  

Por su nombramiento se consiguió en efecto quedaran arreglados los ramos de la administración de esta provincia, concluidos de un modo satisfactorio aquellos litigios y segregada del conocimiento de la intendencia de México. Gobernándola advirtió el Sr. Domínguez el abuso que se hacía por los dueños de obrajes o fábricas de tejidos de algodón de la libertad de los llamados indios y castas, pues a pretexto de que les hacían un suplemento de diez a veinte pesos, los encerraban sin permitirles salir fuera de los obrajes hasta que quedaba cubierta aquella cantidad con el abono de un real diario, que lo hacían durar los fabricantes mucho tiempo, en términos de que había hombre que permanecía en esta esclavitud hasta veinte años, porque cuando ya estaban próximos a saldar su cuenta, les hacía nuevo suplemento para asegurarlos, originándose de estos hechos la más torpe inmoralidad, porque permitiéndose a los operarios casados que entrasen por las noches sus mujeres, por adquirir dinero para conseguir su libertad o fomentar los vicios que practicaban encerrados, siendo entre ellos el crimen de sodomía, hacían dentro de los mismos obrajes un comercio criminal con sus propias mujeres. Hizo representaciones muy enérgicas al gobierno hasta lograr se diese una resolución general, prohibiéndose no solo en la ciudad de Querétaro, sino en todos los pueblos de la república que los dueños de obrajes, panaderías, tocinerías y demás fábricas bajo ningún pretexto tuviesen forzados ni pudiesen suplirles o adelantarles cosa alguna.

El año de 1805, a la sazón que el despotismo español estaba reduciendo a la miseria a multitud de familias, paralizando los giros todos en que consistía la riqueza del país, con el ominoso proyecto de consolidar los capitales de obras pías, vino a curarse a la ciudad de México, y lo solicitó el respetable tribunal de minería por el concepto que sus luces le merecieron, a que dirigiese la representación del tribunal contra aquel proyecto: la formó, y por la solidez de sus discursos se logró la suspensión, a pesar de haberse desentendido el gobierno de los clamores de la mitra de Valladolid, algunas corporaciones de Veracruz y de otras muchas capitales. Este importante, servicio, si bien le captó la estimación y aprecio de los americanos dándolo a conocer en todas partes, no dejó de ocasionarle el encono y persecución del virrey que le despojó de su empleo de corregidor, obligándolo a hacer empeñosos recursos a la corte, que a virtud de ellas hubo de aprobar se suspendiese la consolidación mandando fuese restituido a su destino.

En él fue tanta su pureza, que estando obligados los corregidores y jueces a entregar por producto de tributos, el valor de la matrícula que se formaba de cada una de las jurisdicciones, no se ha dado ejemplar de que uno entregase cantidad alguna de exceso, porque cuando la había, todos se creían con derecho a hacerla suya por la obligación en que estaban de reponer lo que no podía celebrarse; mas el Sr. Domínguez ha dejado documentos que acreditan haber entregado algunos miles de pesos, sobrantes de tributos; y existen otros de haber puesto en las tesorerías de hacienda aun cantidades muy pequeñas de bienes mostrencos.

El aprecio público lo graduó en términos de que la provincia de Guanajuato lo nombró diputado al primer congreso de España, y también fue electo entre los americanos que so insacularon para el sorteo de uno del país qué había de ser miembro de la regencia española.

Los intendentes de Guanajuato, S. Luis Potosí y Valladolid y los prelados y definitorios de la ciudad de Querétaro, le hacían repetidas consultas, y se sujetaban a su dirección en asuntos muy graves.

El año de 808, cuando el rey de España marchó a Francia, y quedó en anarquía la Península, promovió en el ayuntamiento de Querétaro se manifestase al gobierno de México había llegado la vez de mejorar la suerte de la América convocando un congreso en México, y desobedeciéndose todas las juntas y gobiernos intrusos de España. Estaba leyéndose en cabildo pleno la representación que formó al efecto, cuando llegó por extraordinario la noticia de la prisión del virrey Iturrigaray, y valiéndose dos capitulares de la oportunidad del correo que traía la contestación de aquel suceso a esta ciudad, denunciaron a su corregidor, a quien se le pidió por el virrey la representación.

Vino esta, y a pesar de que en ella se promovían los mismos puntos que habían dado causa a la prisión del virrey y otros particulares, fue tal la sorpresa del acuerdo al leerla, que le concedió la consideración de preguntarle si al formarla había tenido presentes dos leyes de la Recopilación de Castilla que le citaron, y cuyo sentido expuso de un modo tan satisfactorio y convincente en favor de aquellas opiniones, que se limitaron el gobierno y el acuerdo a prevenirle las reservase sin comunicarlas a persona alguna.

En seguida de estos sucesos, se resolvió el Sr. Domínguez a procurar la independencia de su patria, y al efecto se puso de acuerdo con los primeros héroes de ella, teniendo varias sesiones en su casa para extender los planes con los Sres. Hidalgo, Allende etc., formando a efecto la primera proclama que se publicó. Esto resulta comprobado en las declaraciones que dieron en Chihuahua el mismo Allende y D. Mariano Abasolo y existen en la cámara de senadores. En el mes de' setiembre de 810 se le puso preso y a toda su familia por este participio, y aunque a pocos días se le dio libertad, ella fue una consecuencia de las reclamaciones que hicieron los gobernadores de las repúblicas de indígenas de la provincia, que tan luego como llegaron a entender la prisión de su corregidor, se pusieron en marcha con multitud de gente a Querétaro y pidieron al juez la persona de su jefe. Esta conmoción hija del amor, duró en todas épocas y contenía a los gobernantes españoles, hasta que la absoluta decisión de la señora Domínguez para obrar sin disimulo por la independencia, hizo que los comerciantes españoles reunidos representasen repetida y enérgicamente, sobre lo nocivo que era a la causa del rey la permanencia en aquella ciudad del Sr. Domínguez y su esposa, lo que ocasionó se le separase de ella, haciendo viniese a la capital con toda precipitación y abandonando su casa y cortos bienes. Su salida de Querétaro le hará un eterno honor, porque desde su casa hasta la garita se reunió un inmenso pueblo, que con lágrimas de dolor manifestaban el aprecio que le tenían, y lo llenaban de bendiciones a pesar de la opresión de los, gobernantes.

En esta capital sufrió una desecha persecución, animada por el dinero del comercio de Querétaro y sostenida por el gobierno, privándolo de sus sueldos a la sazón que sus trabajos y padecimientos lo tenían ya privado de la vista. México lo veía cargado de servicios, perseguido de mil modos y con su esposa en reclusión, caminar por las calles, apoyado de un lazarillo buscando arbitrios para sostener su crecida familia, compuesta de mujer y catorce hijos, diez jóvenes doncellas y cuatro varones que por su edad no podían auxiliarlo. 

Luchó con la suerte y la desgracia seis años, hasta que se logró la independencia; y habiendo recuperado la vista, por la extracción de la catarata que le hizo el diestro facultativo D. Miguel Muñoz, tuvo el placer que da la virtud recibiendo de sus más decididos enemigos, continuas visitas y pruebas de su arrepentimiento, mereciendo que el consejo de estado y que el gobierno imperial lo nombrase ministro del supremo tribunal de justicia, que no tuvo efecto por la variación del sistema; pero el mismo congreso lo eligió para individuo del supremo poder ejecutivo, que sirvió dieciocho meses. Establecida la constitución de los Estados Unidos Mexicanos, las legislaturas en su mayoría lo nombraron para ministro de la corte suprema de justicia, recayendo en él por elección del mismo congreso la primera presidencia del tribunal de que fue decano y en que sirvió cuatro años sin desmentir el buen concepto que en todos tiempos ha merecido, justificado con el respeto que han tributado a sus virtudes los hombres de todos los partidos en que por desgracia ha estado dividida la república, aún en los excesos de su mayor exaltación. Falleció el día 22 de abril a las nueve de la mañana, dejando siete hijas doncellas sin bienes, porque en sus padecimientos perdió los que había adquirido, y sin más apoyo que el que pueda ministrarles el amor fraterno.

Fuente: Gazeta del Gobierno de México (México). 24/6/1830. En la Hemeroteca Digital de la Biblioteca Nacional de España: https://hemerotecadigital.bne.es/hd/es/viewer?id=0c9b838a-7533-4292-a94e-35f3b8f13598&page=2

 Noticia biográfica del señor Domínguez (Miguel Domínguez) en el Registro Oficial del Gobierno de los Estados-Unidos Mexicanos del 24 de junio de 1830. 1 de 2.

  Noticia biográfica del señor Domínguez (Miguel Domínguez) en el Registro Oficial del Gobierno de los Estados-Unidos Mexicanos del 24 de junio de 1830. 2 de 2.


viernes, 4 de noviembre de 2022

5 de noviembre de 1802. Información previa para el matrimonio de Ignacio Pérez y María Guadalupe Argandoña, en Querétaro.

5 de noviembre de 1802. Información previa para el matrimonio de Ignacio Pérez y María Guadalupe Argandoña, en la parroquia de Santiago en santoiago de Querétaro. El matrimonio se realizará el 25 de noviembre de1802 en la misma parroquia. En el documento se aclara que Ignacio Pérez era hijo expósito (adoptado) de Francisco Pérez y de Ignacia Anguiano, y en la siguiente página del documento se menciona que Guadalupe Argandoña era hija de padres no conocidos, y criada en la casa de Josefa Argandoña. Esta última, a su vez, estuvo casada con José Rea.

En la ciudad de Santiago de Querétaro a cinco de noviembre de mil ochocientos dos, ante mi, el doctor don Alonso Martínez Tendero, cura vicario m cap. y juez eclesiástico en ella, y su part., se presentó Juan José Ignacio Pérez diciendo querer contraer matrimonio según orden de nuestra Santa Madre Iglesia con María Guadalupe Argandoña, por tenerlo así tratado y constando con anuencia y consentimiento de sus respectivos mayores, en cuya virtud le recibí juramento que hizo por Dios Nuestro Señor y la señal de la Santa Cruz, por el cual prometio decir verdad en lo que fuese preguntado y siéndolo por lo preciso y conducente dijo: llamarse como queda dicho, ser español de este origen y vecindad en la calle del Puente, hijo expósito en casa de don rancisco Pérez y de doña Ignacia Anguiano, libre de estado y de edad de veintiún años, que conoce a la citada María Guadalupe Argandoña, le tiene dada palabra de casamiento, y de su libre voluntad quiere cumplírsela con el ánimo  del mejor servir a Dios y salvar su alma, que no tiene con la susudicha parentesco de ninguna especie, que no ha hecho voto de castidad, no celebrado otros esponsales, que no tiene enfernedad pública ni secreta, que le sea impedimento, ni el de pública honestidad, inhabilidad, impotencia, ni otro alguno que le obste, que lo referido es la verdad por el juramento que dicho tiene en que afirmó y ratificó, y lo firmó. Doy fe. Firmas. Dr. Tendero e Ignacio Pérez. 

Fuente: https://www.familysearch.org/ark:/61903/3:1:33SQ-GPQM-93P9?i=702

 Información previa para el matrimonio de Ignacio Pérez y María Guadalupe Argandoña, en Querétaro en noviembre de 1802.


miércoles, 2 de noviembre de 2022

8 de septiembre de 1810. Octava compuesta por Juan Nepomuceno Altamirano para comparar irónicamente unos versos del Dr. Cabrales.

Sábado, 8 de septiembre de 1810. Solo una semana antes de que los miembros de la Conspiración de Querétaro fueran descubiertos y encarcelados, el licenciado Juan Nepomuceno Altamirano (También Juan Nepomuceno Mier y Altamirano) compone una octava en la que compara, en forma irónica, los versos que esa misma mañana pronunció el cura doctor José María Cabrales, sobre la obra de reedificación de la iglesia de San Sebastian, a cargo del  coronel don Juan Antonio del Castillo y Llata, con los versos de Homero, Virgilio y Lucano, que relataban las hazañas de Aquiles, Eneas y Julio César, respectivamente. El autor anónimo del libro Acuerdos Curiosos (que algunos creen que fue un religioso franciscano) indica o sugiere que, dado que el mal gusto del señor Llata para edificar era comparable con el mal gusto del doctor Cabrales para versificar, los versos de Altamirano fueron en realidad una forma de ironía. 

El relato dado en Acuerdos Curiosos sobre la bendición de la obra, ocurrida el día 7, y sobre los versos pronunciados la mañana del 8, así como sobre la octava de Altamirano, se muestran a continuación:

7. Esta tarde se bendijo la iglesia de San Sebastián de esta ciudad, que ha sido reedificada por haberse maltratado mucho en tiempo de su cura, don Agustín Durán. Le sucedió el bachiller don Mariano de Ocampo y comenzó a tratar de su compostura, para cuyos costos se estableció una rifa de billetes de a medio real, con varios premios, el mayor de ellos de a cien pesos. Luego, habiendo venido el ilustrísimo señor Lizana a esta ciudad, encargó la obra al señor coronel don Juan Antonio del Castillo y Llata, quien se encargó de ella, costeó parte de los gastos, anticipó los reales para ellos y la llevó hasta su conclusión.

La recompostura consistió en reforzarle los cimientos con talud por la parte exterior, alzarle las paredes de toda la iglesia cosa de tres varas, se le hicieron nuevas todas las bóvedas y la cúpula, y ponerle, tras de la capilla mayor dos grandes estribos por estar la pared desplomada. También se erigió el retablo principal de piedra por el maestro Astudillo, y él mismo pintó toda la iglesia por dentro y fuera. 

8. En la mañana se cantó la primer misa en dicha iglesia con toda la solemnidad posible. Predicó su cura, el doctor don José María Cabrales, natural de México, quien también hizo escribir en parte donde no les ofendiera el sol ni la agua, los si guientes versos: 

                                Complevit que Salomon Domum Domini es prosperatus est. 

                                                                                                Paralipon . Cap . 7.

Campeón famoso y héroe cristiano

a pesar de la impiedad que nos agobia, 

por dichoso, por feliz ya te nombra 

la verdad eterna el texto sacro. 

A la inmortal memoria yo consagro 

lo que mi voluntad se pide, exige grata. 

¡Oh Juan Antonio del Castillo y Llata, 

testimonio eterno de tu bondad bizarra!


Y por cuanto es reputado el señor Llata de tan mal gusto para edificar, como para versificar el doctor Cabrales, hizo el licenciado don Juan Nepomuceno Altamirano la siguiente 

                Octava 

Eternizó de Aquiles la memoria

del vate griego el numen soberano. 

Para cantar de Eneas la ínclita gloria, 

rapto divino transportó al mantuano.

De César vencedor será la historia 

famosa por el genio de Lucano. 

¡Oh Llata! Tus hazañas inmortales 

cuán dignas son del plectro de Cabrales.

Fuente: Anónimo, versión paleográfica y notas de Armella de Aspe, Virginia, Meade de Angulo, Mercedes, y Amerlinck de Corsi, Concepción. Acuerdos curiosos. Tomo I. Gobierno del Estado de Querétaro.

Relato de la bendición de la iglesia de San Sebastián luego de su reedificación, el 7 de septiembre de 1810, según Acuerdos Curiosos.

Relato de los versos del cura Dr. José María Cabrales y de la octava compuesta por Juan Nepomuceno Mier y Altamirano el 8 de octubre de 1810, según Acuerdos Curiosos.



martes, 1 de noviembre de 2022

24 de junio de 1810. Comienzan sesiones de la «academia literaria» en casa del Lic. Juan Nepomuceno Altamirano, según «Acuerdos Curiosos».

24 de junio de 1810. Comienzan las sesiones de una «academia literaria» en casa del licenciado Juan Nepomuceno Altamirano (Juan Nepomuceno Mier y Altamirano), según el libro-diario Acuerdos Curiosos. Se indica que esta academia fue promovida por don Ignacio Villaseñor y Aldama, que en su apertura hubo un discurso del bachiller José María Sánchez, que don Antonio Téllez era el secretario de ella, y que don Mariano Acosta hizo un soneto ese día, el cual se transcribe. La nota menciona además que el establecimiento de esta academia duro poco, porque hubo rumores de que en sus sesiones «trataban en él asunto de infidencia», lo que después de se conocería como la Conspiración de Querétaro.


24. Hoy se comenzó en casa del licenciado don Juan Altamirano, una academia doméstica de literatura que ha promovido don Ignacio Villaseñor y Aldama. En su apertura hizo el bachiller don José María Sánchez un discurso sabio sobre utilidad de tales asambleas. Era su presidente él, y secretario don Antonio Téllez. Don Mariano Acosta hizo también el día de la apertura este

 

                     Soneto 

 

Raya el día el crepúsculo primero 

y el parabién le da el reino de flora 

porque la alegre risa de la aurora 

sucede al resplandor de su lucero. 


De luces, luego báñase el sendero 

y salta el sol hermoso sin demora 

viéndose el hemisferio desde esta hora 

claro, alegre, jocundo y placentero. 


Así de este congreso, en lo privado 

si brillaron las luces sin excesos 

ya aspiran a ser alba y luz del día. 


Las flores el destello han observado 

¿Qué pueden esperar de sus progresos? 

Mucho honor, mucha luz, sabiduría. 


Este establecimiento duró poco, porque se suscitaron voces de que en lo privado se trataban en él asunto de infidencia. Se hizo sospechoso y sus individuos se separaron por sí mismos, temiendo algún resultado.

Fuente: Anónimo, versión paleográfica y notas de Armella de Aspe, Virginia, Meade de Angulo, Mercedes, y Amerlinck de Corsi, Concepción. Acuerdos curiosos. Tomo I. Gobierno del Estado de Querétaro.

Registro del comienzo de sesiones de la «academia literaria» en casa del Lic. Juan Nepomuceno Altamirano, el 24 de junio de 1810, en libro Acuerdos Curiosos.



16 de septiembre de 1810. Registro del arresto a Miguel Domínguez y al Pbro. José María Sánchez, así como a otros abogados y personas varias en «Acuerdos Curiosos».

16 de septiembre de 1810. El autor del libro «diario» Acuerdos Curiosos registra el arresto al corregidor Miguel Domínguez y al presbítero José María Sánchez, así como a otros abogados y personas principales varias, debido al descubrimiento de lo que se conocerá luego como la Conspiración de Querétaro.

16. Amanecieron presos en el Convento del Carmen y Colegio de la Santa Cruz, el corregidor don Miguel Domínguez, el bachiller don José María Sánchez, con otros varios abogados y sujetos principales de esta, por motivos de infidencia.

Fuente: Anónimo, versión paleográfica y notas de Armella de Aspe, Virginia, Meade de Angulo, Mercedes, y Amerlinck de Corsi, Concepción. Acuerdos curiosos. Tomo I. Gobierno del Estado de Querétaro. Consultado el 25 de abril de 2022 en la Biblioteca de las Revoluciones de México del INEHRM.

Registro del arresto a Miguel Domínguez y al Pbro. José María Sánchez, así como a otros abogados y personas varias el 16 de septiembre de 1810, en libro Acuerdos Curiosos