viernes, 28 de octubre de 2022

10 de mayo de 1815. Registro de matrimonio del Lic. Juan Nepomuceno Altamirano con Manuela Arroyo y Suárez.

10 de mayo de 1815. José Xavier Argomaniz registra, en su Diario de Querétaro, que este día el licenciado Juan Nepomuceno Altamirano se casó con doña Manuela Arroyo y Suárez. La fecha no corresponde con exactitud a la del acta del matrimonio, del 13 de mayo (ver enlace). Sin embargo, al comparar ambos documentos, se observa que el licenciado Juan Nepomuceno Altamirano es el mismo Juan Nepomuceno Mier y Altamirano, y que su esposa, Manuela Arroyo y Juárez, también era registrada como Manuela Arroyo y Suárez. 

El registro del Diario de Querétaro es el siguiente:

Mayo de 1815

10. El día de hoy, se casó el licenciado don Juan Nepomuceno Altamirano con doña Manuela Arroyo y Suárez.

Argomaniz, José Xavier. Diario de Querétaro del año de 1815. Obtenido el 28 de octubre de 2022, de http://cdigital.dgb.uanl.mx/la/1020004662_C/1020004669_T9/1020004669_003.pdf .


Registro del matrimonio del Lic. Juan Nepomuceno Altamirano y de doña Manuela Arroyo y Suarez.



9 de junio de 1813. Juan Nepomuceno Altamirano es elegido regidor de Querétaro.

9 de junio de 1813. Luego de que la Contitución de 1812 se juró en Querétaro el 4 de marzo de 1813, se realizaron nuevas elecciones para el ayuntamiento, y en ellas Juan Nepomuceno Altamirano (también Juan Nepomuceno Mier y Altamirano) fue uno de los elegidos como regidores, ya con el sistema constitucional. Esto se registra en el libro Acuerdos curiosos de la siguiente manera:

9. Se celebró la elección de Ayuntamiento, previa una Misa del Espíritu Santo, que se dijo en Nuestra Señora de Guadalupe. La elección la hicieron los mismos electores del diputado, y se concluyó a la una de la tarde, a cuya hora hubo repique general y una larga salva que hizo el vecindario, durante el Te Deum que se cantó en la misma iglesia. Los elegidos fueron: alcaldes: don Manuel Ecala y don José María Frías. Regidores: don José Luis Primo, el marqués del Villar del Aguila, don José Manuel Septién, licenciado don José Estrada y Navedas, don Luis Sánchez y Villar, don Salvador Frías, don José María Marina, don Francisco Guevara, don Máximo López Calzonzi y don José Mendoza (indios), don Juan Nepomuceno Altamirano y don Francisco Varela. Procuradores: don Tomás Ecala y el licenciado don Manuel Arellano. Antes de proceder a la elección se presentó ante la junta de electores el licenciado don Mariano Oyarzábal e hizo ver la nulidad en que iban a incurrir por ser hecha aquella elección contra lo mandado expresamente en la Constitución y no cediendo a la evidencia de las razones que expresaba su sabia representación; pidió testimonio del acta para ocurrir a donde le conviniera  el que se le dio por el escribano de Cabildo.


Fuente: Anónimo, versión paleográfica y notas de Armella de Aspe, Virginia, Meade de Angulo, Mercedes, y Amerlinck de Corsi, Concepción. Acuerdos curiosos. Tomo II. Gobierno del Estado de Querétaro. Consultado el 25 de abril de 2022 en la Biblioteca de las Revoluciones de México del INEHRM.


Registro de elección de regidores en Querétaro el 9 dejunio de 1813 (Acuerdos curiosos). 1 de 3.

 Registro de elección de regidores en Querétaro el 9 dejunio de 1813 (Acuerdos curiosos). 2 de 3.

 Registro de elección de regidores en Querétaro el 9 dejunio de 1813 (Acuerdos curiosos). 3 de 3.


jueves, 27 de octubre de 2022

24 de diciembre de 1807. El Pbro. José María Sánchez renuncia en el oratorio de San Felipe Neri.

 24 de diciembre de 1807. Se informa que el presbítero José María Sánchez renunció en el oratorio de San Felipe Neri el 19 de diciembre del mismo año. Así lo indica José Xavier Argomaniz en su Diario de Querétaro.

El día 19, renunció la prelacía en el oratorio de San Felipe el actual prepósito, bachiller don José María Sánchez, y se segregó de aquel cuerpo, y en su compañía hizo lo mismo el bachilelr don Esteban Gudiño.

Volvio al mismo oratorio el hermano don Félix, que ya antes había estado de laico, quien salió por el mes de junio juntamente con el otro hermano, don José Miguel.

Fuente: Argomaniz, José Xavier. Diario de Querétaro del año de 1807. Obtenido el 27 de octubre de 2022 de http://cdigital.dgb.uanl.mx/la/1020004662_C/1020004662_T1/1020004662_006.pdf




12 de diciembre de 1807. El Pbro. José María Sánchez predica en la función por el día de Santa María de Guadalupe.

12 de diciembre de 1807. El presbítero José María Sánchez predica en la función por el día de Santa María de Guadalupe. Así lo informa José Xavier Argomaniz en su Diario de Querétaro.

La función de este día estuvo con la solemnidad acostumbrada y en ella predicó el padre prepósito de San Felipe, don José María Sánchez. Han de ser 8 días de función en la forma acostumbarda. 

Fuente: Argomaniz, José Xavier. Diario de Querétaro del año de 1807. Obtenido el 27 de octubre de 2022 de http://cdigital.dgb.uanl.mx/la/1020004662_C/1020004662_T1/1020004662_006.pdf .




13 de junio de 1807. El Pbro. José María Sánchez es nombrado prepósito en el oratorio de San Felipe Neri, en Querétaro.

13 de junio de 1807. El presbítero José María Sánchez es nombrado prepósito en el oratorio de San Felipe Neri, en Querétaro. Así lo informa José Xavier Argomaniz en su Diario de Querétaro.

13... Fue la elección en el oratorio de San Felipe Neri, y salió nombrado prepósito el padre don Jose´María Sánchez. Han sido despedidos los dos hermanos coadjutores que había por no tener fondos suficientes el oratorio para mantenerlos.

Fuente: Argomaniz, José Xavier. Diario de Querétaro del año de 1807. Obtenido el 27 de octubre de 2022 de http://cdigital.dgb.uanl.mx/la/1020004662_C/1020004662_T1/1020004662_004.pdf



miércoles, 26 de octubre de 2022

22 de junio de 1805. Bautismo de José Luis Ignacio González, hijo de Epigmenio González y de Anastacia Juárez. Francisco Lojero es el padrino.

22 de junio de 1805. Bautismo de José Luis Ignacio González, hijo de Epigmenio González y de Anastacia Juárez, en la Iglesia Parroquial de Santiago de Querétaro. El padrino del niño fue Francisco Lojero, por lo que se observa que Epigmenio González y Francisco Lojero, quienes serían luego parte de la Conspiración de Querétaro, eran compadres. 

El acta indica lo siguiente:

En la Iglesia Parroquial de Santiago de Querétaro, en veintidos de junio de mil ochocientos cinco, yo, el bachiller don Ignacio Maya V. P., bauticé solemnemente a José Luis Ignacio, de dos días, hijo legítimo de Epigmenio González y de Anastacia Juárez, india y español de la calle de San Antonio. Fue su padrino Francisco Lojero, español de la calle del Carmen, a quien dije su obligación y lo firmé. Firmas. Dr. Alonso Martínez Tender e Ignacio Maya.

Fuente: https://www.familysearch.org/ark:/61903/3:1:33S7-9G8B-9FLS?i=269

Acta de bautismo de José Luis Ignacio González, hijo de Epigmenio González.


martes, 25 de octubre de 2022

24 de abril de 1830. Necrología del Lic. Miguel Domínguez publicada en el periódico La Voz de la Patria.

24 de abril de 1830. En el periódico La Voz de la Patria, en su número 25, tomo II, páginas 6 a la 8, se publica una Necrología del Lic. Miguel Domínguez, escrita por quien firma como C. M. B. 


NECROLOGÍA

La mañana del dia 22 del corriente murió en esta capital el Señor Licenciado D. Miguel Domínguez. originario de Guanajuato y ministro de la suprema corte de justicia: su cadáver se ha sepultado en el panteón de la colegiata de Nuestra Señora de Guadalupe.

Cuando comenzó la carrera de la abogacía se hizo un lugar distinguido éntre los profundos jurisconsultos de aquella era, y destinado de oficial mayor en uno de los oficios del gobierno vireinal, se condujo con tanta sabiduría como integridad en este empleo, del que fue removido para el corregimiento de letras de Querétaro. Luego necesitó desarrollar allí toda su prudencia y energía en obsequio de la humanidad altamente ultrajada: visitó los obrajes de paños de aquella ciudad, y vió por vista de ojos que eran unos depósitos de hombres encueros, reducidos a una vergonzosa servidumbre y vendidos a sus dueños por rateras cantidades suplidas, abusando de su estrechez y miseria, y que no pocos eran tratatados como si remasen en las galeras de Italia. Entró la mano protectora de las leyes para su remedio, y formó reglamentos, pero se le opuso tenazmente una banda de ricos propietarios que le declararon guerra abierta en el Acuerdo de oidores. Domínguez solo, pero armado con el escudo de la justicia, e invocando los fueros de la humanidad y libertad ultrajadas, sostuvo una lid desigual en la que a despecho del oro y de las arterías del foro, triunfó completamente. A poco de esta ocuirencia el virrey Iturrigaray lo suspendió del corregimiento de Queretaro tan solo porque había representado sabiamente que la consolidación de obras pias, iba a destruir la minería, a arruinar la agricultura, a paralizar el comercio, y a dar un ataque cruel a las propiedades. Queríase una obediencia pasiva y que se obedeciesen sin réplica las órdenes dictadas a nombre de un monarca que tal vez la ignoraba. Oyéronse las quejas de Dominguez en el ministerio, y fue repuesto a su empleo; pero sus enemigos no tardaronen suscitarle una nueva y mas terrible persecusion: trataron de enodarlo en el proceso comenzado a formar contra los generales Hidalgo y Allende, porque entendieron que estaba en el secreto del grito de Dololes; por tanto lo arrestaron con toda su familia, y le formaron causa en Queretaro; en breve se desengañaron de que habían dado el golpe en vago, porque Domínguez tan íntegro magistrado como fiel amigo había llenado cumplidamente los deberes de lo uno|y de lo otro. Por semejantes motivos la patria en los dias más difíciles en que pudo verse, volvió sus ojos a D. Miguel Domínguez en 1823 y lo colocó en el supremo poder ejecutivo. Mostróse allí cual era, es decir, sabio, íntegro y profundo político: dirigió y llevó con destreza la nave del estado a puerto de salvamento, y cuando se retiró al seno de su familia, fue llevándose las bendiciones de sus conciudadanos. Pronto se le turbó en esta momentánea quietud, pues se le trasladó al supremo tribunal y corte de justicia de que fue su primer presidente. La magistratura se vio honrada en la persona de este benemérito anciano; su aspecto venerable atraía la vista del que le contemplaba, y la admiración subía de punto al oírsele pronunciar con la facilidad que un arroyo desguaza sus aguas limpidísimas, los oráculos de sabiduria y justicia en los asuntos mas difíciles y complicados: la sinceridad estaba en su corazón, la sabiduria en su cabeza, y la verdad en sus palabras: parecía á Jetró cuando con sus sentencias admiraba á Israel, y hacia que bendijese el pueblo el cambio de su gobierno.

A pesar de tanta justificación, hace un año que una facción desorganizadora regentada por un mal ministro que la acaudillaba, trató de derrocar a Domínguez de aquel asiento de honor en que se veía colocado por tantos y tan legítimos títulos. Vistióse la calumnia con los arreos de la verdad, y osó mancillarlo; pero apenas se presenta Domínguez ante el jurado que lo emplaza, apenas desplega sus labios cuando los destinados a juzgarlo enmudecen, quedan convencidos, y confiesan que en aquel israelita no hay dolo, sino sinceridad, honor, sabiduría y buena fe; si alguna vez pecó fue por demasiado clemente. Retirase a su casa, herido su pundonor y con el pesar de la muerte de su esposa, ocurrida casi en aquella sasón, comienza a padecer en su salud: crueles dolores en la orina lo postran, y en el lecho del dolor muestra su filosofía, y multiplica las pruebas de su piedad y catolicismo: recibe con frecuencia al señor que lo vá a premiar con todo el peso de su gloria: comulga en el mismo día en que ve impávido y de buen humor acercarse a la muerte, llama á su numerosa familia, la exhorta a la virtud, la consuela, la bendice, y muere cual otro Jacob rodeado de una multitud de hijos que le cierran los ojos y lo bañan con sus lagrimas... La patria, sí, la nación mexicana pierde un ornamento precioso capaz por si solo de ennoblecerla, y de darla nombradía en el antiguo continente de Europa.

Padres de la patria, recibid los mas justos pésames por esta pérdida infanda e irreparable. Tan gran jurisconsulto, tan profundo político, magistrado tan íntegro a par que humano y compasivo, no puede reponerse sino con el decurso de muchos tiempos: llorad su muerte, y si queréis mostraros justos, acordaos de sus pobres hijos: acordaos de que ellos también apuraron en la prisión el cáliz de la tiranía: de que por nuestra independencia y libertad derramaron lagrimas, e hicieron votos por vuestra prosperidad... alargad vuestra mano compasiva para socorrerlos en la orfandad en que quedan; y si la idea del finado D. Miguel Domínguez atrajere en pos de sí la de la de un hombre de bien, la de un buen padre de familia, la de un sabio jurisconsulto, la de un protector de la humanidad oprimida, y la de un magistrado integro; que la idea de vuestra administración atraiga irresistiblemente la de un gobierno paternal y compasivo que supo remunerar en los hijos los importantes servicios de tan virtuoso padre. Estas son los flores que esparce sobre su sepulcro, su menor amigo.—C. M. B.


Fuente: (1830, Abril 24). Page 6. Voz de la patria. https://gpa.eastview.com/crl/irmn/newspapers/vozp18300424-01.1.6


Necrología del Lic. Miguel Domínguez publicada en La Voz de la Patria el 24 de abril de 1830. 1 de 3.

Necrología del Lic. Miguel Domínguez publicada en La Voz de la Patria el 24 de abril de 1830. 2 de 3.

Necrología del Lic. Miguel Domínguez publicada en La Voz de la Patria el 24 de abril de 1830. 3 de 3.